Se está nublando, como mis sentidos,
pero apartar no puedo el embriagante fluido.
Está lloviendo, tal como en mi alma,
y sigo aquí pensando que no habrá un mañana.
Se forma un río tal como en mi almohada,
y sigo acostado pensando que me amas.
Relámpagos caen, como los que siento
al prender la luz de mis aposentos.
La serena lluvia me recuerda a ti,
cuando tu me amabas,
cuando a mi lado estabas.
Recuerdo esos días,
cuando me querías,
cuando tu vida por mi darías.
La violencia del relámpago me recuerda a mi,
al verte perdida,
al no poder cerrar mi herida.
El granizo golpea mis cristales,
como tus errores mi alma herida,
más yo nunca te vi afligida.
Dejando de llover está,
y ahora sé que habrá un mañana,
pero no contigo.
3 comentarios:
La lluvia tiene la capacidad de llenarnos el alma de tristezas...Pero luego sale el sol, mostrando las calles limpias.
Besos desde el aire
Escríbelo y poema a poema lograrás olvidar ese dolor.
Saludos.
Gracias por tu visita y por tu acertado comentario.
Abrazos.
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